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24 abril, 2024

Por.  Raymundo Medellín.
20/Febrero/ 2023.


Si Yasmín Esquivel Mossa hubiese renunciado cuando se descubrió que su tesis para obtener la licenciatura, era una copia de otra presentada con anterioridad, quizá ya ni se hablara del tema en los medios de comunicación, sin embargo con el consejo de quién sabe quién y el apoyo de ya saben quién, decidió enfrentar la situación que se presentaba, sin embargo más temprano que tarde se impondrá la ley ante los hechos que cada día son más evidentes, del plagio por parte de la polémica todavía ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.


Yasmín Esquivel Mossa obtuvo el jueves una suspensión provisional en contra de los lineamientos para la integración del Comité de Ética de la UNAM, que analizaría su situación. Y a nadie sorprende que la medida cautelar que por el momento beneficia a Yasmín, fuese emitida por el Juzgado Quinto de Distrito en materia Administrativa de la Ciudad de México, a cargo de la jueza Sandra de Jesús Zúñiga, quien admitió la demanda de amparo y otorgó la suspensión provisional, en contra del origen del Comité de Ética universitario, encargado de revisar las posibles sanciones que se derivarían por el plagio del ensayo con el que se tituló Esquivel Mossa.
El detener una investigación por parte del Comité de Ética de la UNAM, tiene origen en la tibieza con que se han manejado las autoridades universitarias, si desde que se dio a conocer el plagio las autoridades universitarias hubieran definido su posición, quizá no estarían enfrentado este amparo, lo que también nos lleva a pensar sobre el valor mostrado por el rector Javier Barros Sierra, cuando encabezó la marcha universitaria, para defender la autonomía de la UNAM, actualmente está ausente aquélla dignidad y el valor para defender el prestigio universitario.
El fallo de la suspensión sólo se otorgó en contra de los lineamientos que permitieron la formación del Comité de Ética de la UNAM, por lo que al impugnar el origen mismo del Comité de Ética, a la postre, si se le concede la suspensión definitiva a la ministra, cualquier actuación de ese grupo colegiado quedaría invalidada.
Ahora en un comunicado la UNAM expresa que no está de acuerdo con el mandato judicial que busca silenciarla, pero y eso que, permitieron que se llegara a esto que es otra leguleyada más de la plagiaria Yasmín Esquivel.
El rector Enrique Graue debió intervenir en el mismo momento en que la FES Aragón, emitió una resolución en la que consideraba el plagio de la ministra de una tesis entregada en 1987, pero no tuvo el valor y dejó en manos de la Secretaria de Educación Pública la decisión, dependencia donde de ninguna manera iban a estar en contra de Yasmín Esquivel.
La Universidad requiere de un rector que entienda lo que es la autonomía universitaria y tenga el valor de defenderla.

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