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24 abril, 2024

Telaraña Política.

Por. Ricardo Vera.

“El, actual policía ha olvidado. Y, posiblemente de igual manera suceda con el novel comunicador …”En el tren de la vida, tanto el policía, como el periodista caminamos por la misma vía, aunque sea por diferente riel”, “resultado, igual riesgo”.


Con diferencia, el comunicador no utiliza armas de fuego, ni impone fuerza física ante ciudadano alguno, ese es el abismal contraste, pero en la práctica caminamos por la misma vía de acción y vida”.  

Por otro lado, para quienes realizamos actividades periodísticas, conjuntamente con nuestra familia son bastante preocupantes, los asesinatos de camaradas periodistas. En apariencia ejecutados por gatilleros al servicio de jefes del crimen organizado, así como de posibles dirigentes de asociaciones políticas, y/o algún funcionario público disconforme.

“El baño de sangre”, en México es lamentable: sol que para nuestra familia es más lamentable la perdida de un ser querido, tomando en cuenta  que quienes ejercemos periodismo es mayor lamentación la pérdida de un ser querido, que tubo como mayor “falta”, la actividad de informar a la sociedad del acontecer cotidiano al través de diversos medios de comunicación.

Tanto el acontecer sangriento periódico, como resultado de enfrentamiento entre fuerzas armadas de gobierno, como el asesinato de periodistas, ha obligado a jefes policiales principalmente del Estado de México, ha efectuar reuniones masivas con periodistas, y así en conjunto establecer estrategias de mutuo apoyo, esperamos haya buen resultado para salvaguardar nuestra integridad física.

Aunque, su servidor ya soy persona de edad madura, recuerdo el dicho del abuelo, “ya los tiempos no son los mismos”, pero les comento, durante mi actividad periodística de julio de 1972 a la fecha, he sufrido varios atentados, “como dicen partidas de mandarina en gajos”, posiblemente mis agresores en alguna ocasión me dieron por muerto, llegué a escuchar la sentencia de mis ejecutores en especial policías, “nos encomendó el jefe te diéramos un escarmiento para que lo dejes en paz”…y, para que les cuento, usen la imaginación, pero vaya que me surtieron bien”.

La diferencia de servidores públicos y malosos actuales que ya no son partidas de “madre”, hoy son plomazos, hasta que el cuerpo quede como coladera”…En verdad el tiempo y las personas hemos cambiado. Pero en fin, nuestro destino como comunicadores es continuar informando a la sociedad del acontecer cotidiano y, si en esa actividad perderemos la vida,.. Pues ya que….” Los buenos y malos momentos nos hacen quienes somos ahora”. Ser feliz no tiene precio.

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