OPINIÓN: ALFREDO, UN GOBERNADOR QUE VIVE DE PRÉSTAMOS BANCARIOS

RODRIGO DE SANTIAGO/reporterosenmovimiento.com

Aunque el Gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, presume de llevar una relación cordial con el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, convive con diputadas y diputados, alcaldes y alcaldesas morenistas, con el líder nacional del partido, Mario Carrillo, su forma de gobierno y de ejercer el presupuesto público dista mucho de querer un transformación para los mexiquenses. 

Desde 2020, la entidad mexiquense, está entre las cuatro entidades federativas con mayor saldo de deuda pública, y cada año Del Mazo aumenta en miles de millones este monto, como único recurso para realizar algunas obras de infraestructura, pues la mayor parte del recurso estatal se destina a gasto corriente, altos salarios y prestaciones de funcionarios de primer nivel, incluyendo compra o renta de vehículos de lujo.

Históricamente, en los últimos cuatro años, han sido autorizados financiamientos por 19 mil 937 millones de pesos al gobierno estatal: en 2018, 3,400 millones de pesos; 2019, 1,900 millones de pesos; 2020, 6 mil millones de pesos y 2021, 8,637 millones de pesos.

Y para el paquete presupuestal 2022, el gobierno estatal busca que se le autorice un nuevo endeudamiento por 9 mil 500 millones de pesos, de los cuales argumenta que el 60 por ciento se destinará a proyectos de infraestructura en conjunto con la Federación entorno al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. 

Pero lo que no dice es las obras que realiza el Gobierno Federal no se realizan con préstamos bancarios y para 2022 tampoco solicitó adquirir endeudamientos pues tirnen finanzas sanas, y son resultado de la política de austeridad en todas las dependencias.

Del Mazo presume llegar a su beneficiaria 500 mil de la Tarjeta Rosa, en distintas modalidades y que ha entregado más de 300 tarjetas diarias a lo largo de su gobierno pero omite decir que este programa es entregado por operadores del PRI y usado con fines políticoe-electorales, basado en el control, condicionamiento y amenazas a las mujeres.

Así, el Edomex es la entidad que pese al esfuerzo que realicen los mexiquenses en su escuela o trabajos, vivirán eternamente endeudados pues en tan solo cuatro años casi se ha duplicado la deuda, y se carece de espacios públicos para el deporte, cultura, y viven diariamente la inseguridad en el transporte, y aunque del Mazo asegura que la deuda será aplicada en obras de infraestructura que necesita el gobierno federal no le han pedido que se realicen con préstamos.

Es evidente una política de dilapidación y derroche de recursos públicos, pero también es evidente que van a dejar hipotecado el Estado y el próximo gobernador vendrá a pagar esa deuda y van a quedar pocos recursos para resolver la problemática de inseguridad, transporte deficiente, los hospitales que van a dejar inconclusos, y cómo saben que van a dejar el inmueble de Lerdo 300, pues aprovechan los más de 300 mil millones y los préstamos para darse vida de sultanes. Esto es el gobierno de Alfredo del Mazo, derroche, lujo y cuentas en paraísos fiscales.