
Cozumel, Quintana Roo. — La naviera Royal Caribbean dio el paso formal para someter a evaluación ambiental su proyecto Royal Beach Club Cozumel, una propuesta turística anunciada desde 2024 que contempla una inversión de 75 millones de dólares y cuyo análisis ya fue entregado ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
De recibir luz verde, el desarrollo se ubicará en el kilómetro 15+000 de la carretera Costera Sur, y tendrá capacidad para recibir hasta 4,000 turistas por día. La propuesta incluye restaurantes, albercas, baños con regaderas, accesos directos a la playa y diversas zonas recreativas. En total, el complejo se dividirá en seis áreas principales: zona de llegada, alberca central, mercado, playa norte y sur, villa sur y espacios de servicio.
La superficie proyectada comprende 17.42 hectáreas, de las cuales 1.1 hectáreas corresponden a Zona Federal Marítimo Terrestre, destinadas a estructuras semipermanentes como palapas y camastros frente al mar. Otras 4.29 hectáreas estarán en un predio privado, donde se colocará la infraestructura principal. El resto se mantendría como áreas libres, según detalla la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA).
La inversión ya había sido anunciada en marzo de 2024 por la gobernadora Mara Lezama, quien celebró el proyecto a través de la plataforma X:
“Cozumel se prepara para continuar recibiendo a miles de visitantes como nunca antes, en el Royal Beach Club Collection Cozumel, una nueva atracción turística que Royal Caribbean construirá con una inversión de más de 75 millones de dólares”.
El proyecto, una ampliación y renovación
De acuerdo con la documentación entregada a Semarnat, ya existe un club de playa operando en el predio, pero el deterioro de sus instalaciones hace necesaria una remodelación integral que permita modernizar, ampliar y garantizar condiciones seguras para los visitantes.
La naviera aclara que el objetivo no es crear un hotel, sino un espacio de recreación diurno, donde los turistas disfruten actividades de playa sin necesidad de hospedaje en la isla.
Preocupación ambiental
Pese al impulso gubernamental, organizaciones ecológicas locales han advertido riesgos. Activistas señalan posible privatización de playa pública, así como la afectación a selva y vegetación costera, debido a la ampliación del club existente.
La Semarnat tendrá ahora la tarea de revisar la MIA, evaluar los impactos señalados y decidir si el proyecto cumple con los criterios ambientales para su ejecución.
Con este ingreso formal al proceso federal, el Royal Beach Club Cozumel comienza su ruta hacia la autorización definitiva… o a un replanteamiento ambiental.

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